En el marco del Día Mundial de la Concientización sobre el Autismo, padres y niños con esta sintomatología se reunieron en la tarde de ayer en el Predio Municipal de Malvinas Argentinas, con el fin de informar y recabar datos.
“Todos los años nos organizamos y nos reunimos para ver en qué vamos avanzando, qué nos falta, si están todos los chicos detectados, si están en tratamiento o cómo podemos colaborar con ellos a través del grupo de madres para acceder a muchos beneficios dentro o fuera del municipio”, explicó Ester Careada, mamá de Ezequiel. Y agregó: “A nivel nacional y provincial nos faltan más profesionales capacitados en este tema, no tenemos un psiquiatra infantil capacitado para detectar un chico con autismo”. “La idea es concientizar a la gente sobre lo que es el autismo, que no es una enfermedad, es una sintomatología y por eso no se cura. Queremos que la gente empiece a ver por qué estos chicos necesitan terapia de por vida”, finalizó.
Por su parte, Julieta Vich, también mamá de un chico con autismo, comentó: “El año pasado las estadísticas decían que un niño cada 88 era autista, ahora son 60. Asique estamos sorprendidos por el avance. Por eso está bueno el diagnostico precoz. Ya a los 18 meses un buen profesional puede detectar este tipo de anomalías”.
Además, explicaron por qué se identifican con el color azul: “Lo elegimos porque es brillante, nos lleva a pensar en el mar, en esos días de mar muy celeste, muy brillante y también el mar a veces se torna oscuro, como un niño autista que tiene sus días”, aseguró Julieta.
Los padres deben prestar especial atención a medida que sus hijos van creciendo: “Un niño a los 18 meses comienza a señalar algo o a manifestarse con sonidos. Los papas tienen que estar atentos a esas cosas porque es el momento en el que comienzan a detectarse las anomalías, cuando el bebé quiere pedir, cuando quiere sonreír y no lo hace, cuando no manifiesta alegría”, finalizó Vich.
Fuente: Dirección de Prensa de la Municipalidad de Malvinas Argentinas.