El intendente de Malvinas Argentinas declarado enemigo de lo popular, da muestras una vez más con la suspensión de los Corsos en el fin de semana de Carnaval, de su poca simpatía por la organización barrial y su falta de resolución de problemas, esta actitud no es esporádica sino más bien cotidiana en la gestión municipal.
El Intendente de Malvinas Argentinas nunca fue un gran resolvedor de problemas, más bien siempre fue un gran tapador de problemas, una especie de Poncio Pilatos, en esto de lavarse las manos ante un problema o conflicto que plantee el vecino del distrito.
Hace unos días al intendente le llegó la queja de algunos corseros independientes, de la falta de seguridad y control en la realización de los eventos. Inmediatamente el intendente hizo suspender todos los corsos previstos para el feriado de carnaval sin buscar solución ni mediar dialogo con los organizadores barriales.
Lo curioso en lo que refiere a los corsos es que la mayoría de los que existen en el distrito son montados por sus propios punteros políticos, según los barrios, muchas comparsas o murgas no tienen nada que ver con lo político pero son invitados para generar espectáculos y así los punteros cariglinistas generan el lucro, ya sea la venta de espumas, o en las parrillas montadas donde además se venden gaseosas y alcohol(cervezas, vino, fernet etc.) de esta manera lo que empieza en una fiesta muchas veces termina en descontrol y es el motivo que el intendente aduce para prohibir la murga, destrozos, suciedad y pleito, no es algo que guste, pero no pasa por prohibir, acaso no tiene la autoridad para organizarlo, proteger a los artistas callejeros y darle seguridad a quien gusta de estos espectáculos, ¿Cual es el verdadero motivo de la prohibición?. Consultando entre las comparsas y hasta en personas que trabajan en el municipio parece que el motivo no es solo estos mensajes que recibió el intendente, sino que hay una feroz interna entre punteros por quedarse con el negocio de los corsos, que es la misma que genera violencia para romper con los corsos y así poder cambiar de organizador.
También se especula con que el intendente suspendió estos eventos para él poder el año que viene organizar su propio corso en el Palacio Municipal y así centralizar (como todo en su gestión) estos espectáculos trayendo comparsas de otros lados del país quitándole un lugar importante a los corseros independientes que esperan todo el año para mostrar lo practicado en todo el año en sus barrios.
Por último lo más llamativo es el porqué de que a este reclamo en las Redes Sociales el intendente acudió en breve a dar respuestas. Sin embargo hemos visto más quejas y reclamos o pedidos por ejemplo en salud el vecino pide la apertura de las viejas salas de atención primarias, ni hablar del pedido de auxilio para el mantenimiento y cuidados de jardines y escuelas, o el de los estados de las calles y la mugre de los arroyos es raro no?.
No es raro el accionar del intendente que en 19 años se ha preocupado más por tapar u ocultar que en resolver o gestionar. Una vez más Jesús Cariglino levanto su bandera con la leyenda: “Suspender o tapar es más fácil que controlar o gestionar”.
Nota de opinión: Cristian Abdala