Un estudio de ADN confirmó que el cadáver carbonizado que en el cementerio de Merlo y fue identificado parcialmente por una huella dactilar, es el de Jennifer Cadillo, la joven que desapareció el 23 de febrero en la zona norte del conurbano.
Fuentes de la investigación revelaron que un estudio del laboratorio de genética forense de la Delegación San Martín de policía científica determinó con un 99,9 por ciento que hay coincidencia entre las muestras genéticas de los restos carbonizados y de los parientes con los que se cotejaron.
Ya se había identificado el cadáver con una pericia de reconstrucción papiloscópica, pero ahora el estudio de ADN le da certeza a esa individualización.
Jennifer Cadillo había sido vista por última vez el 23 de febrero pasado en el partido bonaerense de Malvinas Argentinas.
Al día siguiente, un cuerpo carbonizado fue encontrado en un terreno con pastizales ubicado en De Gibraltar y París de la localidad de Pontevedra, partido de Merlo, en la zona oeste del conurbano.
Según las fuentes, como nadie reconoció ese cadáver, el mismo fue enterrado luego como “NN” en el cementerio de Merlo.
Los investigadores estaban convencidos que ese cadáver pertenecía a Cadillo, por lo que un fiscal solicitó su exhumación y posteriores peritajes para su identificación, los cuales dieron resultado positivo respecto a la joven desaparecida.
La Policía detuvo en marzo pasado a un ex compañero de trabajo de la víctima, identificado como Carlos Smith (48), que estaría obsesionado con ella.
Fuente: TELAM