El hecho había ocurrido el 17 de junio del 2014, cuando el joven de 15 años murió luego de recibir una bala en el pecho mientras transcurría una persecución policial. Augusto Abal se encontraba junto a su padre en la estación de servicio ubicada en la intersección de ruta 197 y Sucre.
En aquel momento, las pericias habían determinado que la bala que mató a Augusto era de una pistola calibre 9 milímetro y que pertenecía a uno de los policías que participaron de la persecución. A partir de esto, la familia había comenzado con el pedido de justicia del joven; y luego de cuatro años se llevó adelante el caso en el Tribunal de San Martín. “Estábamos medios desilusionados porque no pasaba nada”, comentó una familiar ante el paso de los años y no la realización del juicio.
Finalmente, y luego de cinco días, el Tribunal determinó de que el ex Jefe de calle en la comisaría de Ing. Pablo Nogués fue condenado a perpetua por la muerte de Augusto Abal y de Lucas González, un joven de 20 años que se encontraba en el automóvil que era perseguido por la policía.
Con respecto a la condena, la familiar de Augusto manifestó: “Nos llevó a creer un poquito más en la justicia, el dolor de perder a Augusto no se va, pero nos deja más tranquilos porque se hizo justicias”.